España vive uno de los periodos más secos de su historia. Desde el 1 de octubre, que empieza el año hidrológico, ha llovido un 35% menos y casi la mitad de los cultivos se están viendo afectados, algunos de ellos de manera irremediable.
No podemos hablar de situación de emergencia, pero algunos territorios se encuentran en alerta o en situación de prealerta por la escasez de precipitaciones, según nos confirma Julia Martínez, directora técnica de la Fundación Nueva Cultura del Agua.
“Tenemos que empezar a tomar medidas y reducir los usos económicos del agua para garantizar los usos prioritarios: el abastecimiento humano y los caudales ecológicos”, asegura Martínez en Madrid Directo.
La situación hidrográfica de España es “preocupante”, continúa diciendo la experta, pero no solo porque llueve menos en los últimos años, sino porque estamos consumiendo cada vez más agua.
Pero no todos los usuarios del agua son iguales, apunta la experta. Las extensiones de regadío intensivo han crecido en muchas cuencas y por eso cada vez hay menos aguas en los embalses. “El regadío se bebe en torno a 80% de cada 100 litros de agua disponibles en España”, afirma.