Los vecinos del número 115 de la calle Vélez Rubio de Hortaleza llevan tres años esperando la instalación de su ascensor después de haber pagado casi 180.000 euros. Una obra que la empresa responsable ha dejado a medias, convirtiendo la entrada a sus casas en una auténtica yincana.
Andamios, huecos vacíos, sin puerta de entrada al portal, buzones tirados. Así dejaron la obra, a mitad de hacer. Los vecinos se sienten estafados, ya que pagaron por un ascensor que no solo no ha llegado, sino que además lo han dejado en estas condiciones.
"Tres años hace justo que firmamos el contrato y empezaron el 1 de julio de 2021. Al principio sí fueron más rápidos, había que demoler la escalera y bien. Eso se cumplieron los plazos, pero luego ya en ese invierno se fueron los obreros y aquí quedó todo".
Desde entonces no se ha vuelto a hacer nada en el edificio. "Hay vecinos que tuvieron además que pedir un préstamo porque no tenían el dinero. Todo el mundo ha pagado y él sigue pidiendo más dinero para entregarnos la cabina".
Esta obra inacabada también trae mucha suciedad al portal, además del peligro que supone. Cabe destacar que en este edificio vive mucha gente mayor, que ni siquiera puede salir de casa, y niños pequeños.
Según el responsable de esta instalación, no tienen nada que ver con la empresa que está haciendo la obra y que simplemente se dedican al certificado y el mantenimiento del ascensor. Sin embargo, los vecinos no están de acuerdo con sus declaraciones.
"Nosotros hemos firmado un contrato. A mí me da igual si hay una empresa que tiene que hacer una subcontrata, mantenimientos, obra civil. Hay un señor y una empresa con la que hemos firmado y se tiene que hacer responsable de esto".