Sevilla la Nueva, dividida por la construcción de un macrocomplejo religioso
Diseñado por la organización católica Heraldos del Evangelio, choca con regulaciones de edificación y protección de fauna. Sin embargo, el Ayuntamiento ha aprobado el proyecto a pesar de su propia normativa.
Foto: MADRID DIRECTO |Vídeo: Telemadrid
La población de Sevilla la Nueva está dividida por la posible construcción de un macrocomplejo religioso de la organización católica Heraldos del Evangelio. Para proteger a las aves, la regulación municipal de edificaciones indica que las construcciones deben estar limitadas a 7 metros, pero el proyecto prevé levantar iglesias y torres de más de 70.
El Ayuntamiento contradice su propia normativa
A pesar de la normativa, el Ayuntamiento acaba de dar luz verde a su construcción, pero están a la espera de la aprobación de la Comunidad de Madrid.
El proyecto, diseñado con un espacio de 200.000 metros cuadrados, pretende construir desde un monasterio hasta un colegio. El enclave se encuentra protegida por varias normativas, que limitan que los usos que no supongan un aumento de tráfico, de visitantes, luminosidad y ruidos, por lo que tampoco se pueden construir centros comerciales ni zonas recreativas.
Sin embargo, el proyecto quiere contar con 488 plazas de garaje, para poder convertirse en un centro de peregrinaje de referencia europeo para esta organización, así que y prevén la asistencia de miles de visitantes.
Espacio protegido por la Red Natura 2000
Uno de los vecinos explica que “es una zona de especial protección de aves, es un espacio protegido por la Red Natura 2000”, donde se encuentran también los últimos nidos de águila imperial de Madrid y algunos ejemplares de búho real.
Varios son los vecinos que aseguran que los nuevos propietarios que adquieren parcelas son fieles que buscan seguir haciendo presión para hacer presión y edificar el proyecto religioso.
Quienes apoyan el proyecto defienden que “a nivel espiritual es algo muy importante para la sociedad”. El abogado de los Heraldos del Evangelio cuenta a Madrid Directo: “Nuestros técnicos han elaborado un informe que indica que habría problemas si las torres tuvieran más de 100 metros para las águilas”. Cuando le indicamos el límite de los 7 metros, nos responde que eso solo funciona como “criterio general, en circunstancias excepcionales sí se podría superar esa altura”. Y añade: “Piensa que, si se hubiera adquirido para un hospital, sí se podría superar”.
Los vecinos piden que se respete la normativa para todos. Uno de ellos nos cuenta que en plena construcción tuvieron que rediseñar su proyecto: “Queríamos construir una vivienda con cubierta plana, la normativa municipal nos obligó a ajustar el proyecto, lo mismo queremos que se haga aquí, que no haya excepciones”.
Para otros, lo importante es proteger la tranquilidad de la zona: “Elegimos este sitio porque era un paraje, una zona cepa. No es una discusión ideológica, sino por el bien común, este paraje pertenece a todos”.