Tras la aprobación en el Consejo de Ministros del nuevo sistema de cotización a la Seguridad Social de los autónomos que regirá a partir del 1 de Enero de 2023.
Es verdad que ahora deberá pasar por la tramitación parlamentaria y desde ATA, esperan que no se cambie en lo sustancial lo acordado entre los responsables del Ministerio de Inclusión y Seguridad Social con las asociaciones de autónomos tras largos meses de negociación.
Hemos hablado con José Luis Perea, secretario general de ATA quien se ha mostrado satisfecho tras haber conseguido alguno de los objetivos que se planteaban al principio de las negociaciones.
Por ejemplo, uno de los objetivos que se ha logrado es romper el tope que tenían los autónomos mayores de 47 años a los que se les impedía cotizar por una base superior a los 2.000 euros.
Se incorporan nuevas modalidades de prestación por cese de actividad, incluso algunas compatibles con el desarrollo del nuevo negocio.
En cuanto a las cotizaciones a la Seguridad Social por rendimientos netos, la mitad de los autónomos madrileños pagarán menos que en la actualidad, un 25% que se mantienen como hasta ahora y otro 25% que pagarán algo más.
Las personas que desarrollan su labor, podrán cambiar de tramo cada dos meses y al final del año, se hará un balance en función de las cuentas de la empresa. Eso sí, pueden incluso pagar por bases superiores que les permiten en un futuro tener pensiones de jubilación mayores pero también por accidentes laborales o por enfermedad.
En cuanto a la tarifa plana, se sube a los 80 euros y se mantiene durante el primer año para todas las altas nuevas en la Seguridad Social. E incluso, se abre la posibilidad de ampliarla en el caso de los negocios que no superen el salario mínimo interprofesional.
Perea considera clave este hecho porque el 80 por ciento de los que se acogieron a esta modalidad, permanecen en el negocio tres años después.
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