Un gran edificio de color rosa chicle, así es el Museo del Helado que se encuentra en Austin, la capital del estado de Texas y cuya visita es obligada desde hace dos años en la ciudad.
Singapur o Nueva York son otros de los lugares del mundo donde se puede visitar este curioso museo donde te bautizan nada más entrar con un dulce nombre de helado y el precio de la entrada cuesta desde los 29 a los 40 dólares.
Lo mejor de la visita sin duda es que puedes probar todo tipo de helados y "sin límite".
El museo está organizado por diferentes salas tematizadas, aunque la preferida para los pequeños es la gran piscina de bolas que simula las 'chispitas' dulces que echamos a los helados.