En Madrileños por el Mundo hemos visitado Copenhague, en Dinamarca, un destino ideal para conocer en navidades: aquí comienzan en noviembre y terminan el 1 de enero.
Se dice que Copenhague es “la ciudad más feliz del mundo”, y nosotros hemos querido conocerla por completo. Uno de los lugares más bonitos es la zona antigua de la ciudad, donde se encuentra el Palacio Real y el Puente Oresund, que une Dinamarca con Suecia y que fue inaugurado el 2 de julio del año 2000. Además, Copenhague es uno de los destinos más populares para becarios Erasmus: la educación danesa es una de las más prestigiosas de Europa, por eso no podía faltar nuestra visita a la universidad local.
Uno de los lugares más visitados de la ciudad son los jardines del palacio Rosenborg, que recorren 2,5 millones de personas al año. Tampoco se queda atrás el palacio, que recibe unas 200.000 visitas anualmente. Y no es de extrañar, toda esta residencia de la familia Rosenborg es preciosa. En su interior alberga las joyas de la corona danesa, que incluyen un impresionante cinturón con más de 2.000 diamantes.
El puro espíritu de la navidad se encuentra en el parque de atracciones Tivoli, el segundo más antiguo del mundo y que, además, aún está en funcionamiento. Esta zona se hizo popular en el siglo XVI por un manantial de aguas curativas y después se construyó el parque, que dista mucho de lo que normalmente entendemos por parque de atracciones. Aquí es mucho más tradicional y no encontramos montañas rusas ni lanzaderas, sino que hay tiovivos y norias.
Dinamarca está considerado como el estado de bienestar modélico: el sueldo medio es de 4.600€ y la tasa de paro de apenas un 4%. Impuestos son elevados y una extensa clase media, las claves del modelo danés
