Fue la primera mujer en llevar camiones en la Comunidad Valenciana
Foto: REDACCIÓN |Vídeo: Telemadrid
REDACCIÓN
Admitámoslo: el camión sigue siendo 'un mundo de hombres'. Las estadísticas no engañan: solo un 1% de los camioneros de transporte internacional son mujeres. Y eso que es Alemania el país que sube la media.
Aquí en España hay cada vez más mujeres que lleven camiones, pero se dedican al trayecto nacional. ¿La razón? La dura vida del camionero de trayecto internacional no permite la conciliación con la maternidad.
'Mi cámara y yo' se ha encontrado, sin embargo, con un caso ejemplar: Begoña Urmeneta, la 'Camionera metalera', que trabaja sobre ocho ruedas por pura pasión y que ha conseguido sacar adelante hijos y disfrutar ahora de sus nietos sin dejar de trabajar en lo que le gusta.
"Esta es mi casa. Yo duermo aquí cinco días a la semana"
Begoña nos enseña su segundo hogar: el espacio de la cabina de su camión frigorífico, en donde transporta marisco congelado. Allí tienes su cama, su hornillo para preparar el desayuno y hasta el ordenador con el que también trabaja en lo que son sus hobbies: una revista del motor y una Asociación de música de rock y de metal. De hecho, a Begoña se la conoce en la carretera como 'la camionera metalera'.
Lleva 24 años ya como camionera. Nos cuenta con orgullo que fue la primera en la Comunidad Valenciana. Porque, aunque nació en Pamplona, se trasladó por amor hasta esta comunidad levantina. Tiene 58 años y dos nietos, y no duda en llamar 'casa' a su camión: "Esta es mi casa. Yo duermo aquí cinco noches a la semana".
Está claro que el mundo del camión no está pensado para las mujeres. "Los hombres salen a hacer pis donde quieren y yo tengo que buscar un lugar más escondido... El mundo es mi baño".
El caso es que antes de camionera, Begoña fue camarera. Le metió 'el gusanillo' por este trabajo su ex marido. Y desde entonces, lo suyo ha sido pasión por este mundo. "Este mundo del camión es pasión. Quien no sienta pasión y vocación por esto, no puede hacerlo". Tanto es así, que Begoña nos asegura que no puede estar más de 15 días seguidos sin subirse al camión.