El municipio de Buñol se ha teñido de rojo con la fiesta internacional y multitudinaria: La Tomatina. Para esta, se han empleado 150.000 kilos de tomates variedad pera en estado maduros.
Esta batalla ha durado más de dos horas donde han predominado las camisetas blancas y donde la música se ha hecho notar por las calles de Buñol.
El punto de inicio de esta fiesta ha sido el desfile de seis camiones cargados con 150 toneladas de tomates maduros y jugosos, no aptos para el consumo pero perfectos para esta batalla donde todos luchan contra todos a tomatazo limpio.
Tanto un helicóptero como la Guardia Civil, además de los cuerpos de seguridad han estado vigilando cualquier incidencia que se pudiera dar como consecuencia de la aglomeración.
Como cada año los participantes han acudido con el mejor complemento: las gafas de bucear, una protección para los ojos contra el ácido de los tomates.
El agua también ha llegado desde balcones, terrazas, con mangueras y cubos siendo bien recibida por los participantes.
En el año 2022 esta fiesta fue declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional con una gran repercusión a nivel mundial y con importantes ingresos en la provincia.
Esta guerra comenzó por casualidad en 1945 de la mano de unos jóvenes. Además, con un olor aún a tomate y mientras los participantes desalojaban este espacio han comenzado las tareas de limpieza de fachadas y calles.