La crisis económica y social que está generando el coronavirus aumenta día a día. Las peticiones de ayuda de los colectivos más desfavorecidos, han crecido un 125 por ciento.
Sólo en Madrid capital, el Ayuntamiento ha invertido 18,6 millones de euros para repartir comida a 82.000 personas. Muchas familias tienen que acudir por primera vez a estos servicios de ayuda, como recuerdan organizaciones como Cáritas y Cruz Roja, que atienden a más de 600 familias necesitadas con el reparto de bolsas de comida.
Familias necesitadas
De hecho, en Madrid se han producido las llamadas “colas del hambre” en parroquias y otras asociaciones benéficas, que han aumentado exponencialmente ya que muchas familias con sus miembros en el paro apenas tienen para comer. Además, la imagen de una mujer buscando comida en un contenedor del centro de Madrid en el barrio de Salamanca ha removido conciencias.
Justo este miércoles el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha asegurado que si en el barrio de Aluche, en Latina, se dan "colas del hambre" es "entre otras cosas" porque el Gobierno central no permite al Consistorio "usar recursos financieros".
Por su parte, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha vuelto a pedir a la asociación vecinal que reparte alimentos que facilite los nombres de los solicitantes de ayuda para que sean atendidos por los servicios sociales del Consistorio y para evitar colas que favorezcan contagios de la Covid-19. Villacís ha pedido "colaboración", ya que "la mejor manera de hacerlo si alguien necesita ayuda es que venga a los servicios sociales".
Acabar con las "colas del hambre"
Desde que comenzó el estado de alarma, el Ayuntamiento "está ayudando a comer a 82.000 personas". "30.000 familias pueden comer porque el Ayuntamiento hace contratos de emergencia, que sólo en el caso de los distritos son 6 millones de euros", ha apostillado.
No obstante, Rita Maestre, de Más Madrid, ha pedido este miércoles al alcalde acabar con “las colas del hambre” en la ciudad, reforzar los servicios sociales y utilizar el 20 % del superávit del consistorio para alimentar a “decenas de miles de familias”. El Ayuntamiento tiene que concentrar sus recursos para garantizar algo básico como es que todas las personas de Madrid coman dignamente”.