Sin música ni luces. Así ha vivido Arroyomolinos durante unas horas sus fiestas del Corpus en el recinto ferial.
Una iniciativa para fomentar la inclusión de niños y adultos con Trastorno del Espectro Autista también conocido como TEA.
Este colectivo tiene sensibilidad auditiva y el ruido les provoca crisis sensoriales.
Begoña González, concejal de Integración del Ayuntamiento de Arroyomolinos destaca la importancia de "hacer una integración social natural de este colectivo y este tipo de actividades hacen que las personas con TEA disfruten de las fiestas como cualquier otro vecino".
Para eso es fundamental dar visibilidad.
En nuestro país cerca de medio millón de personas tienen TEA.