Dignidad y Justicia acusa a Marlaska de ceder nuevamente ante Bildu
Las víctimas del terrorismo acusan al ministro de entregar a Bildu un informe sobre 19 casos de supuestos abusos policiales
La asociación Dignidad y Justicia, que ayuda a las víctimas de terrorismo, acusó este martes al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, de "ceder ante Bildu" tras entregar un informe donde figuran 19 casos de abusos policiales, "que no están reconocidos en ningún caso por la Justicia, ni por la Fiscalía".
Así lo afirmó la asociación a través de una carta enviada al ministro, donde su presidente, Daniel Portero, y el vicepresidente, Víctor Valentín, expresaron su completa "desaprobación" a este hecho y ante la "política antiterrorista llevada a cabo durante los últimos meses desde el Ministerio del Interior, que siempre ha perseguido a ETA con determinación".
El Ministerio acaba de entregar a Bildu un informe que relata 19 casos de supuestos abusos policiales que no están reconocidos en ningún caso por la justicia ni por la fiscalía. "Este gesto solo se entiende desde un punto de vista político que tiene la finalidad de ceder ante una reivindicación histórica y completamente perversa de los terroristas". "No comprendemos otra causa y, si la hay, le pedimos que nos la explique", señalaron en la misiva.
"No entendemos qué está pasando para que ahora cambie esta situación, pues es en este departamento en el que todos los españoles confían la persecución de los delitos y del terrorismo", afirmaron.
Ambos responsables añadieron que el departamento de Marlaska "no apoya otras iniciativas de las víctimas, como modificaciones legislativas del Código Penal para perseguir actos de humillación o el impulso de las investigaciones de los 379 casos sin resolver que ha pedido la Unión Europea, pero se da prisa en responder a los herederos políticos de ETA". "Nos ayudaría mucho entender por qué esto es así", solicitaron.
Asimismo, destacaron que la iniciativa de Bildu "va dirigida a equiparar a las víctimas con sus verdugos con el fin de reescribir la historia del terrorismo para justificar pactos y discursos".
Así, sentenciaron que el relato no fue ese que el Ministerio está ayudando a rediseñar. "La realidad es que unos pusieron las nucas y otros pusieron las balas". Y, para zanjar el escrito, recalcaron que "entre los que pusieron la nuca, por cierto, se encuentra mi padre Luis Portero García".