El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha reiterado las críticas del dictamen publicado por la institución sobre el nuevo impuesto a la banca en España al advertir del riesgo de que afecte a la solvencia y la capacidad de dar crédito de las entidades, añadiendo que una banca insolvente resulta "una rémora" para la evolución de la economía.
Guindos ha recordado que la opinión del BCE, sin carácter vinculante, advierte de que el gravamen planteado por el Gobierno puede afectar a la concesión de crédito y al coste de los préstamos para familias y empresas, además de abrir la puerta a una cierta fragmentación del mercado bancario europeo.
En cuanto a la buena marcha de la economía española, el vicepresidente del BCE ha destacado que refleja un sistema financiero sólido, la mejora de competitividad y un incremento muy fuerte de la población, lo que ha permitido un aumento del PIB sin que la renta per cápita crezca con la misma intensidad.
Apunta también la preocupación por cuestiones como la inversión, "muy parada" en España, y que el gasto público no puede crecer tanto como en los últimos años, cuando no estaban en vigor las reglas fiscales.