La patronal del sector, ha anunciado que adelantará los descuentos del 25 de noviembre como medida ante la ralentización de los consumos por los altos precios ya así, incentivar a los consumidores.
Las tiendas locales nos cuentan que este año están vendiendo entre un 15% y 20% menos que en años anteriores. Algunos factores que no están ayudando a la venta de artículos es el buen tiempo que estamos teniendo o, la inflación que provoca el aumento de precios.
Actualmente, la ropa es una de las cosas de las que podemos prescindir ante el aumento de los precios de la luz, gas, alimentos…Los clientes entran a curiosear, pero no compran nada, “si renuevo el armario no como”, comenta una mujer.
“Estamos todavía con los abrigos sin vender”, explica María Luisa Rodríguez, encargada de la tienda Diamond Shop. El sector textil sigue sin levantar cabeza y facturan un 40% menos que antes de la pandemia, además, las expectativas no son buenas.
Por este motivo, muchas tiendas como la de Laura, han decidido adelantar los precios, “lo que hemos pensado es sacar semanas de ofertas y que la gente se vaya animando un poco”, comenta.