Censura, miedo y temor en la carrera diplomática... Lo denuncia Alberto Virella, el presidente de la Asociación de Diplomáticos en declaraciones a Telemadrid, criticando las formas y las actitudes del ministro de Exteriores José Manuel Albares. En las dos últimas semanas ha comunicado La Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE), mayoritaria entre los miembros de la Carrera Diplomática, ha reclamado al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, "criterios objetivos" y una mayor transparencia en el proceso de selección de los embajadores ante las críticas y la frustración generada por la forma en la que se han venido produciendo estos nombramientos en los últimos años.
En una carta remitida este jueves al ministro, a la que ha tenido acceso Europa Press, la ADE esgrime que "el proceso de publicación de vacantes y de selección de candidatos debe ser previsible y transparente, con cumplimiento de plazos predeterminados, y que debe considerar, conforme a criterios objetivos y no arbitrarios, las peticiones de los candidatos, priorizando quienes presenten un perfil más adecuado para cada una de las vacantes".
Cada año se hace pública una lista de las embajadas en las que se va a proceder al relevo del jefe de misión y que entre los diplomáticos se conoce como 'embabombo', a las que los interesados pueden presentar su candidatura, siendo el ministro en último término el que decide quién va a cada destino.
Al margen de ello, el ministro se reserva con un asterisco aquellas plazas que no quiere que se decidan por este método al tratarse de destinos especialmente sensibles o importantes, una práctica que los diplomáticos han denunciado que es cada vez más frecuente.
A juicio de la ADE, "el proceso de selección que se viene aplicando en estos últimos años está lastrado por la inexistencia de un reglamento actualizado que lo regule detalladamente", como hay en otros servicios exteriores, como el Servicio Europeo de Acción Exterior.
FALTAN NORMAS PRECISAS
Así, afean que no hay "normas precisas en vigor sobre clasificación de las categorías de las misiones diplomáticas, duración previsible del desempeño del puesto, méritos concretos a evaluar para cada una de ellas".
Tampoco está establecido el "relieve que se da al desempeño previo de puestos directivos en el Ministerio" a la hora de optar a un puesto ni el "procedimiento de consulta y participación de los principales responsables del Ministerio en el proceso de selección de candidatos, elaboración de ternas de candidatos, o la realización de entrevistas para su selección, entre otros aspectos".
En concreto, llaman la atención sobre el hecho de que "un gran número" de quienes han ocupado el puesto de subdirector general están viendo "año tras año" cómo no son tenidos en cuenta para ser designados jefes de misión pese a que "deberían ser, por la experiencia acumulada y tras una valoración objetiva del trabajo realizado, candidatos idóneos para proseguir su carrera sirviendo al Estado desde la responsabilidad de embajador".
Tras el reciente cese de dos embajadores, el de Croacia y el Bégica, Alberto Virella, presidente Asociación de Diplomáticos Españoles, denuncia que en la carrera diplomática hay miedo a expresar en público opiniones críticas.
"Para la ADE es muy importante que los funcionarios diplomáticos podamos desempeñar nuestra carrera en un ambiente laboral que incentive, motive y favorezca el cumplimiento de las funciones que se nos adscriben", explica en la carta la Junta Directiva que encabeza ahora Alberto Virella.
Por ello, insisten a Albares en la necesidad de que "se apruebe el Reglamento de la Carrera sin mayores dilaciones, dado que su proyecto es conforme con el marco normativo vigente".
"Ello, sin duda, irá en beneficio de nuestro desempeño profesional y del servicio a los ciudadanos", concluyen.