La Fiscalía ha pedido el archivo de la causa abierta tras las denuncias por la aparición de desnudos de menores manipulados con Photoshop en Ayamonte (Huelva), ya que se sustentan en “un aglomerado de rumores”, puesto que las imágenes recibidas por un alumno que podrían probar las acusaciones fueron borradas por orden del director del centro educativo.
En este sentido, el Ministerio Público advierte que el terminal “debió ser puesto a disposición de la Guardia Civil desde el primer momento. Cualquier profesor, funcionario o simple ciudadano debió aconsejar al testigo presentarse en el cuartel o puesto de la fuerza policial o incluso acompañarlo”.
Insiste la Fiscalía que el borrado de las imágenes que podrían ser prueba de cargo podría revestir responsabilidad penal. Explica también que durante la investigación se pudo constatar un ambiente tenso en el instituto y manifiesta su convicción de que hay varios menores implicados que estaban “interesados en que las sospechas se unifiquen exclusivamente en el niño expedientado”.
El menor que tenía las imágenes declaró ante la Fiscalía de Menores como testigo y dijo que recibió las imágenes por WhatsApp y que las mostró a las menores afectadas para avisarlas. También declaró que después procedió a su borrado, siguiendo las instrucciones del director del centro educativo.