Vivir pendientes de la aprobación de las redes sociales repercute en la salud mental. La dictadura del like se utiliza como motor de reconocimiento valorando más a los usuarios que más "me gusta" acumulan. No tener seguidores puede llevar a la frustración sobre todo en los jóvenes.
Las nuevas generaciones viven pendientes de las redes sociales y de lo que suben a estas. Si el resultado de nuestras publicaciones no es el adecuado, se puede producir baja autoestima, problemas de identidad o el riesgo de empezar a publicar contenidos más comprometidos.
“Hay gente que se hace una foto en un sitio peligroso y se mata” comenta una usuaria, “si ves que tu publicación no tiene los suficientes ‘likes’ te frustras”, explica un chico que es usuario en las redes sociales.
“Cuando las personas tienen carencias de socialización o de amor propio y no consiguen los suficientes 'likes' les afecta” explica Abel Domínguez, psicólogo infantojuvenil