Las marcas blancas acaparan ya el 49,4% de las compras de los consumidores. Han crecido más de un 17% lo que ha obligado a que algunas marcas tradicionales de alimentación se replanteen su estrategia comercial y a bajar sus precios.
En el caso de los yogures un 70% de los que se venden corresponden a marcas blancas, aunque muchas marcas tradicionales también fabrican para marcas blancas