El presidente chino, Xi Jinping, ha avisado a su homólogo estadounidense, Joe Biden, de que "no juegue con fuego" sobre la cuestión de Taiwán durante una llamada donde se puso sobre la mesa la preocupación de Pekín sobre una posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, a la isla reclamada por China.
"Aquellos que juegan con fuego perecerán por él", dijo el ministro de Exteriores citando a Xi en la llamada celebrada el jueves, la quinta desde que ambos son líderes. "Esperamos que EEUU tenga los ojos despejados sobre esto".
Xi dijo que Washington debe acatar el "principio de una sola China" y subrayó que su país se opone firmemente a la independencia de Taiwán y la interferencia exterior.Biden respondió al líder chino que la política estadounidense sobre Taiwán no había cambiado y que Washington se opone firmemente a los esfuerzos unilaterales para cambiar el statu quo o socavar la paz y la estabilidad en Taiwán Estrecho, informó la Casa Blanca.
La Casa Blanca dijo que la llamada largamente programada era parte de los esfuerzos de la administración para profundizar las líneas de comunicación con China y "gestionar responsablemente nuestras diferencias".
Apoyo de Rusia a Xi
Rusia expresó este viernes su solidaridad con China en lo que respecta a Taiwán.
"Sin duda, nos solidarizamos (con Pekín). Respetamos la soberanía y la integridad territorial de China y creemos que ningún país del mundo debería tener derecho a cuestionar esto o tomar pasos provocadores o de otro tipo", dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
El representante del Kremlin agregó que "tal comportamiento en el ámbito internacional solo puede causar tensión adicional".
También el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, confió este viernes en que no ocurran "provocaciones" capaces de agravar la situación en torno a Taiwán.
El ministro ruso, de visita en Taskent, aseguró que Rusia "no tiene ningún inconveniente" con que China defienda su soberanía.