La Policía Municipal de Madrid puso este fin de semana 228 denuncias por botellón y detuvo o imputó a 39 conductores por circular habiendo consumido alcohol y drogas, ha informado este mediodía la delegada de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento, Inmaculada Sanz.
La concejal ha calificado este fin de semana de "relativamente tranquilo", ya que las multas por beber alcohol en la vía pública han caído sobremanera respecto a las más del mil registradas los días del 20 al 30 de mayo. Lo acaba a la época de exámenes y a que hoy comienzas las pruebas de acceso a la Universidad.
Asimismo, los agentes municipales interpusieron 208 denuncias por no llevar mascarilla y 18 a responsables de locales por distintos incumplimientos. "No ha sido un foco de problemas las terrazas en banda, el cumplimiento ha sido muy bueno por parte de la hostelería y han hecho un gran esfuerzo por adaptarse. Como siempre ha dicho este ayuntamiento, hay que conjugar los intereses de la actividad económica con el descanso vecinal", ha manifestado Sanz.
Respecto al anunciado refuerzo de controles para detectar conductores que han consumido alcohol y drogas al volante, compuesto por 50 agentes más y controles itinerantes, la delegada ha indicado que este fin de semana los policías revisaron 1.2000 coches y realizaron 917 pruebas de drogas y alcohol, que arrojaron la cifra de 39 detenidos o investigados por ello, uno menos que entre el 28 y el 30 de mayo.
La edil ha aseverado que se mantendrá este refuerzo los próximos fines de semana y que se mantendrá la vigilancia en cuanto a fiestas y botellones, ya que teme que las circunstancias puedan cambiar pronto tras los exámenes finales y de Selectividad. Por último, ha pedido "prudencia" a los madrileños porque aunque se va reduciendo la incidencia y hospitalización por Covid, la pandemia sigue entre nosotros.
