La policía nacional investiga la relación de un hombre detenido en Francia con los autores del 11-M. Su ADN estaba en el piso de Leganés en el que los terroristas se suicidaron con una bomba, matando a Francisco Javier Torronteras, subinspector de los GEO el 3 de abril de 2004, solo tres semanas después del 11-M.
Catorce años después, con las huellas y muestras de ADN sin identificar recogidas en la vivienda, han saltado sus alertas. Agentes de la policía antiterrorista francesa han detenido en Lyon este martes, a petición de la Audiencia Nacional, a un hombre por su presunta relación con una muestra de ADN. Un marroquí de 43 años que vivió en España a principios de la década pasada. Entre los muertos estaban, Jamal Ahmidam, 'El Chino' y Serhane Ben Abdeljamid, 'El Tunecino': Los dos jefes de la célula responsable de la mayor matanza terrorista de la historia de Europa.
8 muestras de ADN sin identificar
Se trata de muestras de ADN extraídas de los distintos escenarios relacionados con los atentados que no han podido ser identificados. Uno de estos perfiles, el 'P12', "solo aparece en Leganés" y "se encuentra en efectos muy variados, algunos de ellos de uso exclusivo personal", lo que llevó a concluir que tenía "una relación estrecha y de confianza con los moradores del 'piso franco' o de seguridad, hasta el extremo de deducir su relación o inclusión en la célula".
Otro, el 'P39', "anónimo de varón", aparece en tres lugares relevantes: la finca de Chinchón en la que fueron preparados los artefactos colocados en los trenes; el piso de Leganés en el que se suicidaron siete de los responsables del 11-M; y el coche Skoda Fabia que fue encontrado en Alcalá de Henares el 13 de junio de 2004, todos ellos municipios madrileños.
La existencia de estos perfiles anónimos llevó a deducir que el número de implicados directos en estos hechos tampoco se ha podido determinar aún con exactitud. Los citados así lo indicaban al concluir que hasta que sean identificados dichos perfiles "aparecen determinadas variables no susceptibles de ser aclaradas" y "que llevan a considerar que el número de presuntos implicados directos en los hechos objeto de esta instrucción judicial no puede cifrarse con la debida certeza y seguridad".
