Francia se blinda contra las protestas: 146 estudiantes de rodillas detenidos
Los estudiantes se manifiestan contra el incremento de cuotas de suscripción para estudiantes extranjeros
89.000 dispositivos policiales desplegados por todo el país de los cuales 8.000 serán dirigidos a París
Paolo Chinchayhuara / EFE
Casi 150 estudiantes detenidos y ordenados a arrodillarse en una manifestación contra el incremento de cuotas de suscripción para estudiantes extranjeros a las afueras de París. El ministro francés de Educación, Jean-Michel Blanquer, que ha considerado las imágenes "chocantes", ha anunciado a través de una radio francesa que se investigará la detención masiva de jóvenes.
FRANCIA SE INMOVILIZA
Seis partidos de fútbol cancelados, la torre Eiffel y los museos de París cerrados y 89.000 policías desplegados por el país (frente a los 65.000 del pasado sábado). Francia se blinda ante ante el temor de que la cuarta jornada de protestas de este sábado de los llamados "chalecos amarillos" dejen un mayor reguero de destrozos. Los activistas se proponen incluso tomar el Elíseo, la sede de la presidencia. El presidente francés, Emmanuel Macron, hablará la semana que viene tras días de silencio con el argumento de no atizar más el fuego.
El Gobierno considera que el movimiento se está deshinchando y degenerando en violencia, instrumentalizado por grupúsculos extremistas y teme que se utilicen armas. Desde las 282.000 personas que la policía contabilizó en la primera jornada de manifestaciones (17 de noviembre), se han reducido a 10.000. El ministro de interior, Christophe Castaner, ha considerado que “el movimiento ha cambiado de naturaleza. Los manifestantes pacíficos se mezclaron con personas radicalizadas que cruzaron los límites de la legalidad republicana, que cayeron en la violencia y el odio”.
Je n'aurai aucune tolérance pour ceux qui instrumentalisent la détresse de nos compatriotes. Place à la République. Place à nos valeurs. Place au respect du droit. Place au dialogue et à la réconciliation. Place à la paix et à la protection. pic.twitter.com/8YVhl8twJr
Está convocada una última reunión de crisis del Gobierno que ha mostrado su voluntad de diálogo con una reunión de la ministra de Trabajo, Muriel Pénicaud, con los sindicatos y la patronal. No hubo representantes de los "chalecos amarillos", algunos de cuyos portavoces han sido víctimas de amenazas por parte de otros miembros del colectivo al querer implicarse en las negociaciones.
Ante el mutismo del presidente, Emmanuel Macron, han sido su primer ministro, Édouard Philippe, y Christophe Castaner los encargados de comunicar "una movilización excepcional" que dirigirá 8.000 de las fuerzas policiales solo en París. El Gobierno ha advertido a los "chalecos amarillos" que se consideren pacíficos no vayan a París porque corren el riesgo de verse atrapados por la violencia.
COMERCIOS Y HOTELES EN PICADO
Los principales monumentos y museos de la capital francesa permanecerán cerrados durante toda la jornada: la torre Eiffel, el Arco de Triunfo, el Louvre o la Ópera. Las reservas hoteleras caen un 50% y las de restaurantes hasta un 30% (la semana pasada alcanzó un perjurio de 10 millones de euros). Se cerrarán también algunos mercados, gimnasios, jardines y edificios municipales de atención al público. Estos altercados podrían diluir la recuperación turística que estaba registrando París tras los atentados de 2015.