La presidenta del Congreso de los Diputados Meritxel Batet se sitúa en el centro de la polémica por la votación que convalidó este jueves la reforma laboral pactada por el gobierno, la patronal y los sindicatos, merced a un supuesto error del diputado popular Alberto Casero.
La clave es lo que dice el Reglamento del Congreso sobre el proceso de voto telemático de los diputados que no están presentes en el hemiciclo en el momento de una votación.
El artículo 4º, es claro al señalar que la presidencia debe comprobar el voto y el sentido del voto del diputado ausente. La votación telemática necesita una doble confirmación. Un sistema que ha dado problemas en más de una ocasión.
"Cuarto. Tras ejercer el voto mediante el procedimiento telemático, la Presidencia u órgano en quien delegue, comprobará telefónicamente con el diputado autorizado, antes del inicio de la votación presencial en el Pleno, la emisión efectiva del voto y el sentido de este".
Lo cierto, es que desde el incremento del uso del voto telemático en la Cámara a causa de la pandemia, la Presidencia ya no aplica la exigencia de comprobación telefónica del sentido del voto.
Para votar de forma telemática, los diputados se conectan a la intranet del Congreso con el usuario y contraseña que les identifica.
El reglamento también establece que un diputado que ha votado de forma telemática puede solicitar el voto presencial, debe autorizarlo de forma expresa la mesa de la Cámara, siempre y cuando no haya empezado la votación.
En 2006 el Tribunal Constitucional anuló una votación del Parlamento Vasco porque una diputada de la oposición no pudo ejercer su derecho al voto por un problema electrónico.