Parón económico en España. En los tres últimos meses el PIB sólo creció dos décimas (0,2) un frenazo que nos acerca a una recesión. Y además este dato coincide con los precios aún muy altos.
El IPC adelantado del mes de octubre se sitúa en el 7,3%. España está en fase de estancamiento y de elevada inflación.
En pleno verano el PIB creció un 3,8% respecto al año pasado. Son tres puntos menos que el trimestre anterior y se sitúa ya por debajo de la previsión de crecimiento para este año.
El consumo y las exportaciones crecen, pero menos que antes. Mientras que la inversión en vivienda ya está en negativo, a esto hay que unir una inflación todavía alta. En octubre se moderó un punto y medio hasta situarse en 7,3%.La suma de altos precios y escaso crecimiento son un peligroso cóctel. La CEOE advierte de que no hay margen para el optimismo en los próximos meses.