Este lunes viajan a Melilla un grupo de diputados para comprobar sobre el terreno qué ocurrió en Melilla tras el asalto de inmigrantes el pasado 24 de junio en el que murieron 23 personas. El documental de la BBC ha reabierto la polémica y ha provocado una gran fisura entre el Gobierno y sus socios por la actuación de Interior. Marlaska será preguntado el martes en el Congreso.
Un documental de la BBC que denuncia el arrastre de muertos del lado español al marroquí, en una avalancha de más de 2.000 inmigrantes subsaharianos. Además las imágenes recogen los momentos posteriores a la avalancha, y se ve a uno de los inmigrantes sin vida siendo arrastrado por agentes marroquíes. Hubo 23 muertos.
Hoy el coordinador general del PP, Elías Bendodo, exigió al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que “no sea un presidente a la fuga" y dé la cara por lo que sucedió en junio en la valla de Melilla.
Bendodo dijo que Sánchez es experto "en quemar ministros y darse después a la fuga”, pero indicó que “no puede quitarse de en medio”.
Por ello, le exigió que aclare si estaba informado o no de la decisión que se tomó “de arrastrar cadáveres de una frontera a otra”, en el caso de la tragedia de la valla de Melilla.
Unas imágenes que han sembrado la polémica entre los propios apoyos del Gobierno. Por segunda vez desde que ocurrieron los hechos se ha solicitado la creación de una comisión de investigación en el Congreso, una iniciativa impulsada por EH-Bildu que cuenta con el apoyo de Unidas Podemos, ERC, Junts, PdeCAT, CUP, Más País y Compromís, y que no descarta apoyar el PP si fuera necesario "llegar hasta ese punto", según ha deslizado su portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra.
Los grupos, que elevan a 37 el número de migrantes fallecidos, advierten de que a tenor de las imágenes difundidas por la cadena británica "podría considerarse que varias de las muertes se produjeron en territorio español", y reclaman una investigación "urgente", tras no lograr ponerla en marcha en julio.
El PP, que no cierra tampoco la puerta a solicitar otra comisión de investigación diferente a la registrada, ha reclamado esta semana la comparecencia urgente de Marlaska en la Comisión de Interior y el visionado de todas las cámaras de seguridad del perímetro de la frontera durante las horas en las que se produjo el intento de salto a la valla.
No obstante, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras arropar públicamente al titular de Interior, dijo el viernes desde Viana do Castelo (Portugal) que el ministro "dará cuenta de la gestión" que se hizo en la tragedia de Melilla porque "no hay nada que ocultar". Sostuvo que Marlaska "va a comparecer en el Congreso, en la Comisión" y "dará cuenta de la gestión que hizo el Gobierno de España en esta tragedia y lo haremos con total transparencia" porque "no hay nada , al contrario, que ocultar".
Marlaska no entraba en el fondo del asunto. Como lleva haciendo desde que ocurrieron los hechos, el Ministerio del Interior ha reiterado esta semana "su más firme respaldo" a la actuación de la Guardia Civil en el salto masivo de la valla, ya que intervino "de forma proporcional, ajustada a la legalidad y firme" ante un intento de asalto violento a la integridad territorial de España.
Unos argumentos que ya esgrimió el propio Marlaska ante el pleno del Congreso el pasado 21 de septiembre. Casi tres meses después de la tragedia fueron las primeras explicaciones que el ministro ofrecía en sede parlamentaria tras la petición de varios grupos, entre ellos ERC y EH Bildu, que finalmente retiraron la solicitud de que fuera Pedro Sánchez quien rindiera cuentas en el Congreso.
Desde Interior califican de "decepcionante y sorprendente" las acusaciones de la BBC "sin el sustento de ninguna prueba" e inciden en que "absolutamente nadie, ni la Guardia Civil, ni la Gendarmería, ni la Fiscalía General del Estado, ni el Defensor del Pueblo ni las autoridades marroquíes sostienen que las muertes tuvieron lugar en territorio nacional".
Pero la pregunta clave la lanzaba Ciudadanos. ¿Qué hubiera pasado con otro gobierno?
De hecho el PSOE azuzó con ganas al entonces ministro del interior del PP, Fernández Diaz en febrero de 2014. En esa fecha en la playa del Tarajal en Ceuta fallecieron 15 inmigrantes. La polémica estuvo en torno a si la Guardia Civil utilizó pelotas de goma, cuando estaban en el agua.
Entonces, la reprobación del ministro del interior no prosperó y tampoco se llegó a realizar una comisión de investigación en el Congreso.
Pero hay más, desde el PSOE también se ha atacado al PP cuando estaba en el Gobierno con las concertinas de la valla de Melilla. Visiones distintas de un mismo partido desde el Gobierno o desde la oposición.