Después de 2 años y medio de obras, mañana será por fin una realidad. La imagen que teníamos de la Plaza de España se transforma este lunes en un nuevo espacio verde. Entre las novedades: se pone en marcha el túnel que atraviesa el eje Bailén-Ferraz, que se suma al que ya había entre la calle Mayor y los jardines de Sabatini.
Una infraestructura subterránea, que conectará la Gran Vía con la M-30. Y, con ese soterramiento del tráfico, en la superficie: una plataforma peatonal de más de 70.000 metros cuadrados, con la que podremos ir desde el Palacio Real al Templo de Debod.
Es más, podremos andar por el Parque del Oeste, la Casa de Campo, los jardines de Sabatini, el Campo del Moro o Madrid Río sin necesidad de cruzar ni una sola calle. Una apuesta por la sostenibilidad en uno de los puntos turísticos de la capital.
Telemadrid ha sido testigo de la expectación que ha despertado su reapertura en los madrileños