Los efectos de Filomena son todavía visibles en madrid semanas después. En varios centros educativos de la región aún no han podido retomar la normalidad por problemas de seguridad. Es el caso del colegio Nuestra Señora de la Concepción en Ciudad Lineal.
Allí, los árboles rotos y abandonados en el patio, no permiten que los niños puedan salir al recreo cumpliendo las distancias de seguridad.
El concejal de la Junta de distrito se ha comprometido a agilizar los trabajos para limpiar el recinto.
Lo primer es pensar en solucionar el problema inmediato, pero después vendrá otro: en verano no habrá árboles que ofrezcan sombra para aliviar el calor de los recreos, y eso también preocupa a los padres.