El confinamiento disparó un 30% las agresiones y comportamientos violentos de los hijos contra sus padres. Telemadrid ha estado con tres adolescentes que narran los motivos que les ha llevado a tener este comportamiento. Una conducta que se agrava por el hecho de querer vivir rápido, el consumo excesivo de alcohol o de sustancias estupefacientes.
Toda una tortura familiar agravada este pasado año y que provovó un aumento de la violencia filio-parental y que, en muchos casos, esconde situaciones de acoso vividas por los chicos, a la que no se enfrentan, sacando su ira y agresividad con los padres.