En la urbanización La Quinta del Pilar, en el barrio de Villaverde, los vecinos están hartos. Denuncian la inseguridad que ocasiona en sus calles la venta continúa de drogas desde que a principios de mes ha abierto sus puertas un nuevo narcopiso en una vivienda ocupada de la calle Estroncio.
No quieren volver a pasar por el infierno que vivieron durante tres años en otro narcopiso desmantelado hace sólo unos meses.
Los vecinos se quejan del abandono que sufren y creen que se trata de los mismo narcotraficantes. Han comenzado a movilizarse y reclaman a las autoridades medidas para que no tengan que volver a pasar por el mismo calvario.