¿Sabes por qué la Semana Santa cae unos años en marzo y otros en abril?
Todo depende de movimientos astrales y de un monje muy sabio y conciliador
REDACCIÓN
A estas alturas de año y a pocos días de la celebración, todo el mundo sabe ya que la Semana Santa comienza el 22 de Marzo con el Viernes de Dolores y que Jueves y Viernes Santo será, respectivamente, los días 28 y 29 de marzo.
Todos sabemos también que la Semana Santa no tiene fecha fija de celebración y que, a lo largo de los años, marzo y abril se turnan para darle acomodo.
El año 2023 la Semana Santa tuvo lugar a principios del mes de abril. Este año, le ha tocado al mes de marzo. ¿Sabes por qué? ¿Cómo se calcula?
En realidad todo depende de movimientos astrales. Pero, antes de contarlo hay que conocer cómo y por qué se llegó al método de cálculo que se utiliza actualmente.
¿Cómo se llegó a este método?
La fecha de celebración del aniversario de la Resurreción de Jesús, es decir la Pascua, generó gran controversia en los primeros años del Cristianismo. Las autoridades eclesiásticas no se podían de acuerdo en el 'Computus paschalis' (para abreviar 'el Cómputo').
Para establecer un poco de orden, el Concilio de Arlés (año 314) obligó a todos los cristianos a celebrar la Pascua en la misma fecha, otorgándole al Papa la potestad de fijarla.
Como aún quedaban parroquias 'díscolas' que celebraban la Pascua a su manera, en el Concilio de Nicea de 325 se abordó de nuevo y se establecieron algunas condiciones, como fijarla en domingo y que nunca coincidiera con la Pascua de los judíos, para evitar confusiones.
A pesar de todo, las discrepancias continuaron, sobre todo porque por aquel entonces la Iglesia de Roma y la Iglesia de Alejandría no se ponían de acuerdo en los cálculos astronómicos.
Un par de siglos después, el monje bizantino Dionisio el Exiguo que, a pesar de su sobrenombre hizo grandes aportaciones al mundo de las matemáticas, tuvo el enorme mérito de convencer a todo el mundo para que realizaran los cálculos de igual manera.
¿Cómo se hace el cálculo?
Dionisio dejó establecidas las siguientes condiciones para realizar el cálculo:
Siempre tiene que caer en domingo porque, según los evangelios, domingo era el día en que resucitó Jesús
Se elige el domingo siguiente al primer plenilunio (Luna Llena) del equinoccio de primavera en el Hemisferio Norte
Para evitar confusiones (el equinoccio de primavera no es siempre el mismo día) Dionisio fijó la fecha del 21 de marzo como 'equinoccio eclesiástico'. No coincide con la llegada exacta de la primavera pero hay menos confusiones
Si la Luna Llena cae en domingo, entonces la Pascua se celebra el domingo siguiente para evitar coincidir con la Pascua judía (la muerte de Cristo tuvo lugar el día de la Pascua judía)
Teniendo en cuenta su dependencia de la Luna llena no puede, por tanto, ser ni después del 25 de abril y ni antes del 22 de marzo,
Resumiendo
La pascua de Resurrección es, básicamente, el domingo inmediatamente posterior a la primera luna llena del mes de marzo.
Este año la Luna estará en fase de luna llena el día 25 de marzo por tanto el Domingo de Resurrección es el día 31 y eso marca las fechas del Jueves y Viernes Santo y del resto de celebraciones.
Por cierto, Dionisio el Exiguo no sólo fue teólogo y un brillante matemático, entre sus numerosos méritos es el responsable de acuñar la expresión "después de Cristo".