La NASA ha elegido a la empresa aeroespacial Blue Origin, propiedad del magnate Jeff Bezos, fundador y presidente ejecutivo de Amazon, para desarrollar un sistema de aterrizaje que permita llevar astronautas a la Luna bajo la misión Artemis.
En concreto, Blue Origin desarrollará un "sistema de aterrizaje humano" para la misión Artemis V que permitirá a dos astronautas viajar desde la órbita de la Luna a la superficie del satélite, donde estarán durante una semana realizando "actividades científicas y de exploración", según un comunicado de la NASA.
Es el segundo contrato que la agencia espacial estadounidense otorga para desarrollar la tecnología que permitirá a la humanidad volver a pisar la superficie lunar, después de que en 2021 le diera el primero a SpaceX, de Elon Musk, valorado en casi 3.000 millones de dólares (2.774 millones de euros).
El contrato de SpaceX también contemplaba el desarrollo de un sistema de aterrizaje, que será utilizado en las misiones Artemis III y IV.
La agencia estadounidense ha defendido que tener dos diseños diferentes dará mayor robustez y asegurará un mayor ritmo de viajes a la Luna.
"Juntos, estamos invirtiendo en la infraestructura que allanará el camino para llevar a los primeros astronautas a Marte", ha explicado el administrador de la NASA, Bill Nelson.
El pasado abril, la agencia espacial estadounidense, junto a la canadiense CSA, dio a conocer a los miembros de la misión Artemis II, una mujer y tres hombres que en noviembre de 2024 volarán alrededor de la Luna en el que será el comienzo de una nueva era espacial con Marte a la vista.
La misión de diez días alrededor de la Luna tendrá como comandante a Reid Wiseman y como piloto a Victor Glover, mientras que como especialistas de la misión irán la astronauta Christina Hammock Koch y Jeremy Hansen, este último de la CSA.
La NASA prevé para 2025 el envío de la primera misión tripulada del programa Artemis que aterrice en el satélite.