Este 23 de septiembre se celebra el Día Internacional de las Lenguas de Signos, reconocida como lengua oficial desde 2007. En España la utilizan más de 20.000 personas con problemas auditivos. Una herramienta cada vez más presente en todos los ámbitos.
Personas sordas de todo el mundo y sus familias celebrarán este día con la vista puesta en un objetivo: que la presencia y uso de lengua de signos en todos los ámbitos "deje de ser un derecho pendiente y se convierta en una realidad", tal y como reclama la Federación Mundial de Sordos (WFD, en sus siglas en inglés), con el lema 'Sign Language: Rights for All' (Lengua de señas: derechos para todos).
Desde este lunes arranca una semana en España de reivindicaciones de las personas sordas, que culminarán el sábado 28, Día Internacional de las Personas Sordas, en una jornada en la que están previstas concentraciones, actividades institucionales, lúdicas y culturales en varias ciudades españolas.
Según la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE), la lengua de signos española está regulada por ley desde 2007 y cumple con las características formales del lenguaje humano: tiene gramática visual propia y su evolución depende de la comunidad de personas que la usan. "Las lenguas de signos en España han pasado de una situación puramente doméstica y restringida a una situación, como la de hoy en día, en la que su uso trasciende a todos los ámbitos y contextos sociales", subraya esta organización.
Visitamos el primer colegio madrileño que imparte la lengua de signos como una asignatura más: el Colegio Gaudem. Es su signo de identidad.