El entrenador español José Antonio Camacho llegaba hoy a Pekín para firmar un contrato de tres años con la selección de fútbol de China, a la que intentará clasificar para el Mundial de Brasil 2014, informó la agencia oficial Xinhua.
Camacho, acompañado con su equipo técnico, fue recibido por una marea de medios de comunicación chinos en el aeropuerto de Pekín, donde dijo sentirse orgulloso de dirigir el equipo oriental e incluso demostró sus avances en el chino mandarín, diciendo "nihao Zhongguo" ("hola, China"). La Asociación China de Fútbol (CFA) ha estudiado durante un año toda clase de candidatos para ponerlos al frente de la selección, que hasta ahora entrenaba el chino Gao Hongbo.
En los últimos años parecía que la CFA había decidido no contratar más a técnicos extranjeros, ya que los dos últimos (el holandés Arie Haan y el serbio Vladimir Petrovic), no habían dejado buen recuerdo. Sin embargo, el único entrenador que ha logrado clasificar a China para unos Mundiales, los de 2002, también era foráneo, y además un viejo conocido del fútbol latinoamericano, el serbio Bora Milutinovic.
El primer compromiso de Camacho con China será ante Singapur, el 2 de septiembre, en el primer partido de la fase primera de grupos para la clasificación del Mundial brasileño. Además del equipo de la pequeña ciudad-estado, Camacho deberá guiar a los dragones chinos hacia la victoria en un grupo en el que también se encuentran Jordania e Iraq, selección esta última también dirigida por otro icono futbolístico de los ochenta, el brasileño Zico.
Pero la fase de clasificación asiática es larga, y a esta fase de grupos, si China logra clasificarse en primer o segundo lugar, le seguirá otra con rivales más complicados, en la que se espera que estén las clásicas potencias del continente, como Japón o Corea del Sur.
La ACF ha asegurado que el plan de contratar a Camacho es un proyecto a largo plazo, por lo que incluso aunque no logre llevar a los chinos a su soñado segundo Mundial no perderá el puesto.