La plantilla del Atlético de Madrid retomó este domingo los entrenamientos con el foco en el partido de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Chelsea, en el que Diego Simeone está pendiente de Yannick Carrasco, Sime Vrsaljko y José María Giménez, de los que ninguno trabajó con el grupo.
El internacional belga se recupera de una lesión postraumática en la musculatura de la pierna izquierda y es duda para el duelo europeo que se jugará en Bucarest, al igual que el lateral croata, por unas molestias que le apartaron por precaución del choque contra el Levante, en el que cayó lesionado muscularmente el central uruguayo, cuya presencia frente al Chelsea parece muy difícil, a la espera de las pruebas que determinen el alcance de la dolencia.
Tampoco se entrena aún Héctor Herrera, que sigue pendiente de superar la Covid-19 mediante una PCR negativa para volver a la competición. Hasta entonces no podrá incorporarse a la dinámica de grupo ni entrar en juego con el conjunto rojiblanco, con el que ya acumula cuatro partidos fuera por ese motivo, ante el Celta, el Granada y el doble choque contra el Levante de esta semana.
La convocatoria desvelará si están o no disponibles para Simeone para viajar a Bucarest. El Atlético partirá esta misma tarde, a las 19.00 horas, en avión hasta la capital rumana, escenario del duelo que se debía disputar en el Wanda Metropolitano por las restricciones en España para la llegada de ciudadanos procedentes del Reino Unido por la cepa británica de la Covid-19.
Kieran Trippier es baja segura para el choque, una vez que sigue sancionado por la Federación Inglesa, mientras que Simeone recupera para la cita a Stefan Savic -se entrenó este domingo con los titulares, aunque no jugó por sanción ante el Levante- y Saúl Ñíguez, que también cumplió sanción contra el equipo valenciano.