La medida pedida por Vox para retirar provisionalmente las banderas LGBTI colgadas en el edificio de grupos municipales, ha sido concedido por un auto del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 18 de Madrid. Decisión que algunos partidos rechazan, y amenazan con no cumplir.
Tras esta medida, fuentes municipales han confirmado que el ayuntamiento 'respeta las decisiones judiciales y tomará las medidas necesarias para cumplir el auto, puesto que es su obligación'.
El auto recalca que solo analiza "con carácter urgente y limitado la colocación de banderas/pancartas no oficiales en el exterior de un edificio o espacio público y no lo que la misma representa. Añade que lo contrario sería una interpretación espuria y descalificaría a quienes hicieran un uso indebido, partidista o ideológico de una cuestión que está al margen de que la bandera no oficial represente al colectivo LGTBI.
La resolución judicial también añade que el Ayuntamiento no ha aportado en este incidente procesal ninguna prueba documental que acredite la existencia de un acuerdo municipal autorizando la colocación de las banderas/pancartas en el edificio municipal de grupos situado en la calle Mayor, número 71, de Madrid, por lo que el juzgado se plantea una vía de hecho, la "ausencia total de procedimiento administrativo".
Ante esta decisión judicial, los partidos de izquierda han mostrado su rechazo. Más Madrid asegura que no la obedecerá, mientras que el PSOE ha instado al alcalde, José Luis Martínez-Almeida, que sea él quien no acate el mandato del juez.