La vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP, Paloma Martín, cree que la proposición de ley que han presentado PSOE y PNV para reformar la ley del suelo se queda "coja", por lo que ha avanzado que su formación presentará su propia norma en el Senado, donde tiene mayoría absoluta, eliminando el tope al alquiler que se incluyó en la ley de vivienda.
La también senadora del PP ha explicado en declaraciones a los medios de comunicación este lunes que la reforma de socialistas y nacionalistas vascos se queda coja porque "no va a resolver el problema de verdad que tiene la vivienda en España", que a su juicio es la falta de oferta de inmuebles y la ocupación.
Además, Martín ha criticado que la ley del suelo de PSOE y PNV se presentó sin haber hablado con el PP, con las comunidades autónomas y entidades locales, y apenas 15 días después de que el Grupo Popular anunciara su intención de presentar su propia ley. "El Gobierno vuelve a repetir los mismos errores", ha incidido Paloma Martín este lunes.
LA LEY, EN SEPTIEMBRE
En este escenario, Paloma Martín ha anunciado que su grupo presentará en septiembre una ley en el Senado, por lo que probablemente la admisión a trámite de la propuesta de PSOE y PNV ya se habrá votado en la Cámara Baja.
La idea del PP con su norma es reformar la ley del suelo para dar "seguridad al planeamiento urbanístico" y que no se produzca una nulidad en cascada; la derogación de determinados artículos de la ley de vivienda, entre ellos el que recoge el índice de precios de alquileres y regula las zonas de mercado tensionado; y tener menos tolerancia con la ocupación.
Paloma Martín ha asegurado que el PP mantendrá "capacidad de diálogo" con otras formaciones en la comisión del Senado donde se debatirá la propuesta de ley, que asegura que será "razonada" y "consensuada" previamente con el sector.
"Donde se quieran sumar partidos y donde nos podamos encontrar todos para dar respuesta al grave problema de vivienda que España necesita, estaremos muy contentos", ha dicho la senadora, que incide en la necesidad de reformar la ley de vivienda por la preocupación que muestran al respecto los promotores inmobiliarios.