La balanza por cuenta corriente cerró 2014 con un superávit de 1.200 millones de euros, frente a los 15.000 millones de 2013, lo que supone el segundo año consecutivo con saldo positivo desde los años noventa, según datos provisionales del Banco de España.
Con estos 1.200 millones, la balanza de pagos -que mide las transacciones de bienes, servicios, rentas y transferencias de España con el exterior- redujo el superávit un 92,5% respecto al dato de 2013.
Según el Banco de España, este descenso es consecuencia de la caída de 23.900 millones de las rentas primaria y secundaria, mientras que la balanza de bienes y servicios creció en 25.100 millones gracias al impulso de las partidas del turismo y los viajes, que obtuvieron un saldo positivo de 35.400 millones.
También al cierre del año pasado y según el supervisor bancario, la economía española experimentó una capacidad de financiación de 5.600 millones de euros frente a los 22.000 millones de 2013, lo que representa una bajada del 74%.
Las estimaciones del Banco de España muestran un incremento interanual tanto de las exportaciones como de las importaciones de bienes y servicios del 5,8% y 7,1%, respectivamente.
En relación al mes de diciembre, el superávit por cuenta corriente se situó en 4.800 millones de euros, frente a los 2.800 millones del mismo mes de 2013.
En declaraciones a Efe, la analista de Funcas María Jesús Fernández ha considerado que España acabó con el año pasado con superávit por la caída del precio de la energía. A juicio de Fernández, si no fuera por la caída energética de los últimos meses, la balanza de pagos española hubiera cerrado 2014 con saldo negativo.
Esta analista también se ha referido a cómo las importaciones crecieron mucho en el conjunto del año pese a experimentar importantes descensos en los últimos meses.
En el mismo sentido, el analista de AFI Matías Lamas ha señalado que la caída del precio del petróleo ayudará a que la factura energética con el resto del mundo sea más baja, pero también permitirá que la recuperación de la demanda interna sea más intensa.
Esta situación, a su juicio, ha marcado el superávit de cierre de año y ha hecho que la economía acabe el ejercicio con una capacidad de financiación del 0,5% del PIB. Además, la cuenta financiera, excluido el Banco de España, acumuló una salida neta de fondos de 800 millones. La posición deudora neta del Banco de España frente al sector exterior registró en diciembre de 2014 una disminución por importe de 4.700 millones.