La matanza de Bucha ya ha tenido consecuencias diplomáticas en Alemania, cuyo gobierno ha declarado "persona non grata" a 40 diplomáticos rusos de la embajada de Berlín, a los que se ha instado a abandonar el país, informó la ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock.
Se trata de personas que "día a día trabajan contra nuestra libertad y contra nuestra cohesión social", según el comunicado emitido por Exteriores, donde se alude a la "increíble brutalidad" de la cúpula rusa, plasmada en las imágenes procedentes de Bucha.
Por su parte, el presidente alemán, Frank Walter Steinmeier, ha admitido su "error" de apreciación, por haber defendido la necesidad de llevar adelante el gasoducto germano-ruso Nord Stream 2, en sus tiempos como ministro de Asuntos Exteriores.
El actual canciller, el socialdemócrata Olaf Scholz, suspendió finalmente su licencia para su puesta en marcha al día siguiente de la invasión rusa de Ucrania, el pasado 24 de febrero, en medio de fuertes presiones y críticas a la posición demasiado tibia respecto a Moscú.
Francia expulsa a diplomáticos rusos
El Ejecutivo francés ha anunciado también la expulsión del país de "numerosos" diplomáticos rusos al considerar que su actividad es contraria a los "intereses de seguridad" nacionales.
"Francia ha decidido expulsar a numerosos trabajadores rusos con estatuto diplomático destinados en Francia y cuyas actividades son contrarias a nuestros intereses de seguridad", apuntó una nota del Ministerio de Exteriores.
Su comunicado, de apenas tres frases, señaló que este paso "se inscribe en una iniciativa europea" y recalcó que su primera responsabilidad es "garantizar la seguridad de los franceses y de los europeos".
Según la cadena BFM TV, van a tener que abandonar Francia "una treintena de personas", una cifra no detallada por Exteriores.
Italia y Dinamarca se unen a las expulsiones
El ministro de Exteriores italiano, Luigi di Maio, anunció desde Berlín que se ha comunicado la expulsión de 30 diplomáticos de la embajada rusa por ser un riesgo "para la seguridad nacional" y siguiendo las decisiones que han tomado otros países europeos.
Di Maio, que se encuentra en Berlín para la conferencia del Grupo de apoyo a Moldavia, anunció que se convocó al embajador ruso en Italia, Sergei Razov, para comunicarle la expulsión de estos 30 diplomáticos considerados "persona non grata" y además, agrego que se produce "en el contexto de la situación actual de crisis consecuente a la injustificada agresión a Ucrania por parte de la Federación de Rusia".
Por su parte, Dinamarca expulsará del país a quince diplomáticos rusos, a los que acusa de actuar como espías y ser un riesgo para la seguridad nacional, anunció este martes el ministro de Asuntos Exteriores danés, Jeppe Kofod.
"No queremos espionaje en suelo danés, por eso serán expulsados de Dinamarca ahora", afirmó Kofod.