La Unión Europea se encamina hacia la aprobación de un quinto paquete de sanciones a Rusia por su invasión de Ucrania, con la prohibición de importar carbón ruso como medida más destacada, mientras la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, se preparan para ir esta semana a Kiev.
El doble anuncio, de la nueva tanda de medidas restrictivas y del viaje a Kiev, se produce al hilo de la enorme conmoción causada por el descubrimiento del asesinato de civiles indefensos por las fuerzas rusas en zonas ocupadas y ahora recuperadas por los ucranianos en los alrededores de Kiev, como la localidad de Bucha.
Las nuevas sanciones serán discutidas por los embajadores de la Unión Europea este miércoles con vistas a alcanzar un acuerdo unánime entre los 27 Estados miembros, que según dijeron a Efe fuentes europeas podría estar listo para su publicación el jueves en el "Diario Oficial" de la UE, si nadie plantea objeciones.
CARBÓN, BANCOS, BARCOS Y EXPORTACIONES
Además de cortar la importación de carbón, que sería la primera arremetida de la UE contra la energía rusa, el quinto paquete de restricciones prohíbe las transacciones con cuatro bancos rusos, así como el cese de ciertas exportaciones europeas de tecnología, madera, marisco o licores.
"Pero esto no es todo. Estamos trabajando en sanciones adicionales, incluso sobre las importaciones de petróleo", dijo Von der Leyen en una comparecencia conjunta con Borrell.
Desde Luxemburgo, donde participó en una reunión de ministros de Economía, el vicepresidente económico del Ejecutivo comunitario, Valdis Dombrovskis, añadió que si se quiere "hacer daño" a la economía rusa hay que "mirar" a sus hidrocarburos, que supusieron el 62 % del total de sus exportaciones a la UE en 2021.
En cuanto a las compras europeas de carbón, suponen unos 4.000 millones de euros al año en ingresos para Moscú y los bancos concernidos, entre ellos el VTB, el segundo del país, que tienen una cuota de mercado doméstica del 23 %, indicó Von der Leyen.
Rusia es un gran proveedor de carbón térmico para la UE y representó el 70 % (36 millones de toneladas) de las importaciones del bloque el año pasado, según datos de Eurostat.
Bruselas quiere impedir también a los barcos rusos y las embarcaciones operadas por Rusia que accedan a los puertos de la UE, con "ciertas exenciones" en productos agrícolas y alimentarios, ayuda humanitaria y energía. Además, en este capítulo de transportes, la propuesta incluye una prohibición a los operadores por carretera rusos y bielorrusos.
Además del carbón, los cuatro bancos y el transporte marítimo y por carretera, el paquete diseña un cuarto pilar que se focaliza en prohibiciones a las exportaciones a Rusia de tecnologías "específicas" como ordenadores cuánticos, semiconductores avanzados y maquinaria de transporte por valor de 10.000 millones de euros, con el objetivo de seguir degradando la base tecnológica y la capacidad industrial de Rusia.
En quinto lugar, Bruselas propone que se añadan a la lista de exportaciones prohibidas de la UE a Rusia otros productos por valor de 5.500 millones de euros "para cortar el flujo de dinero de Rusia y sus oligarcas", que van "desde la madera hasta el cemento, desde mariscos hasta licores", precisó la presidenta comunitaria.
Y el sexto pilar, si los Veintisiete respaldan las sanciones propuestas por Bruselas, impedirá la participación de empresas rusas en licitaciones públicas en los países de la UE y la exclusión de "todo apoyo financiero ya sea europeo o nacional a los organismos públicos rusos, porque el dinero de los impuestos europeos no debe ir a Rusia de ninguna forma", según Von der Leyen.
SANCIONES INDIVIDUALES Y EXPULSIONES DE DIPLOMÁTICOS
El paquete sancionador se completa con los nombres de "docenas de personas de la política, el sector empresarial y dedicadas a actividades de propaganda", así como con "más entidades de los sectores financiero, militar, industrial y de transporte", indicó el jefe de la diplomacia europea.
Borrell informó además de su decisión de declarar personas no gratas a 19 miembros de la Misión Permanente de la Federación Rusa ante la UE en Bruselas por realizar "actividades contrarias" a su estatus diplomático, y les exigirá que abandonen Bélgica.
Una medida considerada "abiertamente inamistosa", "hostil" y "completamente infundada" por la legación rusa ante la UE, por la que Moscú consideró "inevitable" tomar "medidas recíprocas adecuadas". EFE