El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se ha visto obligado a defender su gestión en la Casa Blanca debido a una serie de rumores de que los congresistas demócratas podrían iniciar el conocido “impeachment”, un proceso de juicio político para destituir al actual presidente.
Trump, se considera como el republicano más popular en la historia del partido, y no ve motivo alguno por el que deba ser destituido. “¿Cómo destituir a un presidente que ha ganado quizás las mejores elecciones de la historia, que no ha hecho nada mal y que tuvo los dos primeros años más exitosos que ha tenido cualquier presidente, y además que es el republicano más popular en la historia del partido?”, se preguntó.
Sin embargo, la otra cara de la moneda la encontramos en Rashida Talib, que acaba de ingresar a la Cámara de Representantes como miembro del partido demócrata, y no ha tenido temor a asegurar que su objetivo es acabar con la presidencia de Donald Trump.
Hasta el momento, el actual presidente es investigado por Robert Mueller, especialista en investigación fiscal. Se encuentra estudiando los posibles lazos existentes entre Trump y el Kremlin, al que acusan de interferir en los comicios de 2016 en favor del candidato republicano.
A pesar de esto, la flamante presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, demócrata, ha pedido a los miembros de su partido que sean pacientes y esperen a los resultados de esta investigación sobre lo que se ha denominado como “trama rusa”.
Donald Trump se defiende ante toda acusación. "Solo quieren lanzar un proceso de destitución porque saben que no pueden ganar en (las elecciones de) 2020. ¡Demasiado éxito!", señaló a través de su cuenta de Twitter.