La Comunidad de Madrid abrirá expediente contra los propietarios de la gasolinera de Alberto Aguilera, en trámites de ser declarada Bien de Interés Cultural (BIC), por instalar pladures y estructuras publicitarias de forma temporal en su fachada para promocionar una película de animación. Así lo ha confirmado a Europa Press fuentes de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid. La propia directora general, Paloma Sobrini, ha explicado en Twitter que la Ley de Patrimonio "no permite esa publicidad comercial en Bienes de Interés Cultural".
Este miércoles un arquitecto y doctorando en la UPM, Rafael Hernando, publicó en Twitter fotografías de este inmueble protegido y consultando al respecto a la propia Sobrini y a varias asociaciones en defensa del patrimonio. "¿No sé podría haber elegido cualquier gasolinera para taparla con pladur y pintarla de rojo? ¿No merece un mayor respecto cultura y artístico un edificio, que si bien es una gasolinera, tiene los mismo valores simbólicos que puede tener cualquier monumento cultural?", se ha preguntado Hernando.
La gasolinera, ubicada en Alberto Aguilera número 18, es uno de los elementos "más importantes de la arquitectura racionalista española", según ha comentado el propio Hernando a Europa Press.
El inmueble en trámites de ser protegido es una réplica del edificado originalmente por el arquitecto Castro Fernández-Shaw Iturralde en 1927. La Ley de Patrimonio Histórico de Madrid incide en que aun con expediente incoado, el bien ya debe ser protegido cautelarmente.
La Dirección General de Patrimonio Cultural abrió el expediente de conservación para el edificio de oficinas y servicios, la torre de hormigón armado de carácter simbólico y publicitario, y las dos marquesinas del mismo material.
Los motivos publicitarios que han supuesto la apertura de este expediente promocionan una película de animación.