Todos los miércoles durante la temporada invernal se realizan catas en las zonas mas elevadas de la sierra madrileña para evitar el riesgo de aludes. Telemadrid ha acompañado a un equipo de controladores que miden las condiciones de la nieve en Valdesquí, y esos controles se han hecho en condiciones muy difíciles.
Al llegar al lugar de la cata nos sorpende la lluvia y la ventisca. La visibilidad es muy escasa y la sensación térmica ronda los 15 grados bajo cero. A las condiciones extremas se suma el peso. Los agentes forestales van cargados con todo el material necesario para las catas.
Lo primero que miden son los parámetros como altitud, coordenadas, fuerza del viento y temperatura. Todo se registra en esta época de nuevas tecnologías con lápiz y papel para que nada falle. El siguiente paso es medir el espesor.
A continuación se analiza el perfil estratigrafico, es decir la dureza de las diferentes capas del manto nivoso. Para eso se hace un sondeo por golpeo con una pesa de metal.
Con la ayuda de la pala se ve la estabilidad de la nieve, un dato fundamental para para determinar el riesgo de aludes. Aquí es esencial la veteranía de los agentes forestales. Con sus dedos y la observación son capaces de determinar si hay mas o menos riesgo de desprendimientos. En esta ocasion el riesgo es bajo.
Ante el hielo se recomeinda mucha precaución por las caídas. Los datos son anlaizados por Aemet y serán publidados el próximo viernes.