Una joven, de origen ucraniano, de 24 años ha sido detenida en el distrito madrileño de Ciudad Lineal por la Policía Nacional, acusada de fingir su propio secuestro para pedir un rescate a su madre.
La hija urdió un plan con varios amigos para mandarle mensajes a su madre, que en ese momento se encontraba de vacaciones, haciéndola creer que había sido secuestrada y que la estaban torturando.
En los mensajes reclamaban a la madre 2.139 euros para que fuera liberada de sus captores.
Los hechos sucedieron el pasado miércoles 14 de junio en el piso de la joven. Allí acudieron varios amigos a verla, ya que su madre se había marchado de vacaciones.
Uno de ellos manifestó que necesitaban dinero y la joven dijo que a ella también le hacía falta. Al conocido se le ocurrió la idea de maniatar a la joven, enviarle fotografías a su madre simulando un secuestro y pedirle dinero para su rescate.
La chica aceptó y lo planearon todo. Le dio su móvil de forma voluntaria al amigo, a cambio de que, cuando su madre le enviara el dinero, debía darle parte del beneficio.
La chica dijo que luego le explicaría a su madre que le habían robado el teléfono.
UN RESCATE DE 2.139 EUROS
La madre empezó entonces a recibir varios mensajes en los que amenazaban con torturar a su hija si no realizaba un pago de 2.139 euros vía Bizum a ese número de teléfono.
Cuando la madre regresó a la casa no había nadie en la vivienda y su hija tampoco contestaba a sus llamadas. Además, faltaban juegos de llaves de su coche, ordenadores y una tablet.
La mujer acudió a la comisaría de Ciudad Lineal y denunció el presunto secuestro de su hija. Señaló que la joven nunca había hecho nada parecido y que estaba en tratamiento psicológico.
El grupo de Policía Judicial activó entonces el protocolo de secuestro. Se acordó con la madre una posible entrega del dinero y un dispositivo de vigilancia sobre los posibles autores el viernes 16 de junio. Se intervinieron móviles y la Policía estableció varias vigilancias.
Ese mismo día, la joven presuntamente secuestrada se presentó junto a su novio en su domicilio de Ciudad Lineal.
EL NOVIO CONFESÓ LOS HEHOS
La joven declaró que le habían robado el teléfono y que desconocía quién estaba detrás de los mensajes.
Tras un enfrentamiento verbal entre la madre y la hija en el que se intercambiaron reproches mutuos, el novio de la hija acabó derrumbándose y confesando los hechos.
En ese momento los policías procedieron a detener a la joven, que trató de impedir su detención, intentó escapar, insultó a los agentes y comenzó a gritar.
Finalmente, fue arrestada por simulación de delito, estafa, resistencia a la autoridad y desobediencia.
Su abogado defensor asegura que la joven es inocente, que sí que fue retenida en contra de su voluntad y solicita que se abran nuevas diligencias para esclarecer los hechos.
La joven ha sido puesta en libertad dos días después del arresto.