El PSOE despejará "en los primeros días de noviembre" la incógnita de quién es la persona “reconocida por las bases” y con un “puesto relevante” que liderará la candidatura socialista para el Ayuntamiento de Madrid en las elecciones del próximo año.
El elegido por el PSOE-M que encabeza Juan Lobato, con el beneplácito de la dirección federal, tendrá que dejar su labor actual para centrarse en la candidatura a la Alcaldía que ahora ostenta el popular José Luis Martínez Almeida, según trasladan fuentes socialistas.
Desde Ferraz, según fuentes de la Ejecutiva socialista, trasladan que manejan datos que invitan a pensar que el “desaparecido” Almeida no tiene garantizados los apoyos para continuar al frente de la Alcaldía de la capital y que, por tanto, hay “opciones” para el candidato socialista.
La duda debe quedar despejada antes de que, según el calendario aprobado por la Ejecutiva federal, entre el 21 y 22 de noviembre se presenten las candidaturas para los municipios en los que, como es el caso de Madrid, aún no hay candidato ni se han celebrado primarias.
Tras varios contactos entre Sánchez y Lobato sobre distintos perfiles, el candidato fue elegido a mediados de septiembre en una reunión de ambos líderes, tras la decisión de dejar fuera de la terna a Mercedes González, actual delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid.
En el PSOE se muestran seguros de que el elegido gustará en las bases porque no es un desconocido y porque, además, cumple con el requisito de que tiene “hambre” por lograr la Alcaldía y se quedará en el Ayuntamiento en la oposición si no vence en las urnas.
Por tanto, la persona que hará ‘ticket’ con Lobato para las elecciones de mayo es conocida por las bases socialistas, tiene ambición para luchar por el reto y ahora mismo está en un puesto relevante que debe abandonar.
Su perfil es capaz, dicen en el PSOE madrileño, de captar apoyos en el centro izquierda, porque el primer objetivo que se plantean es que sea capaz de arrebatar votos a Mas Madrid, toda vez que ahora no hay una Manuela Carmena enfrente que monopolice el electorado progresista.