El Centro Hispano-Dominicano ha acogido hoy un acto en recuerdo de este brutal crimen. La organización Movimiento contra la Intolerancia ha reclamado al Gobierno una "acción decisiva" frente al racismo y la xenofobia. El Movimiento contra la Intolerancia ha reclamado al Gobierno una "acción decisiva frente al racismo y la xenofobia", cuando se cumplen veinte años del asesinato de la dominicana Lucrecia Pérez, que fue tiroteada en Madrid por unos encapuchados el 13 de noviembre de 1992.
En un comunicado, la agrupación ha demandado al Ejecutivo que prohíba todas las actividades que promueven la xenofobia, que ilegalice los partidos y organizaciones que alienten el racismo, y, además, que cierre todas las webs que inciten al odio y la discriminación.
Y ha planteado al Gobierno la creación de unidades policiales formadas para neutralizar y prevenir la formación de grupos neonazis y de odio, así como de Fiscalías y operadores jurídicos especializados en delitos de odio y discriminación.
Asimismo, ha pedido también al Ejecutivo apoyo integral a las víctimas de crímenes de odio y le ha instado a aplicar y mejorar la legislación en materia de racismo.
Lucrecia Pérez, emigrante dominicana que tenía 33 años en el momento de su muerte, fue asesinada a tiros por un guardia civil fuera de servicio, escoltado por tres adolescentes.
El crimen se produjo cuando la víctima cenaba a la luz de unas velas con otros compatriotas entre las ruinas de la antigua discoteca "Four Roses", del barrio madrileño de Aravaca y que decenas de inmigrantes utilizaban como refugio.
Debido a sus connotaciones racistas, el caso del asesinato de Lucrecia Pérez provocó una gran conmoción y rechazo en la sociedad, y los cuatro implicados en el crimen fueron condenados a penas que sumaron 126 años de cárcel.