El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo formalizará esta semana su candidatura para liderar el PP, el plazo expira el 9 de marzo, y arrancará 10 días de campaña en los que tiene previsto recorrer las diferentes comunidades autónomas para explicar su proyecto a los afiliados del partido antes del congreso extraordinario que se celebrará en Sevilla los días 1 y 2 de abril.
Los candidatos a la Presidencia del PP deberán oficializar su candidatura entre el 8 de marzo y hasta las 20.00 horas del día 9 de marzo, según recoge el Reglamento del XX congreso del PP aprobado en la Junta Directiva Nacional del pasado 1 de marzo. Para ser proclamado candidato es necesario presentar el apoyo de, al menos, 100 militantes.
El propio Feijóo ha confirmado que hará campaña en los próximos días y recorrerá todas las comunidades autónomas. "Me reuniré con mis compañeros y les explicaré por qué he dado ese paso, qué creo que podemos hacer y, sobre todo, les trasladaré la enorme responsabilidad en la que incurrimos", dijo en la cadena Cope, un día después de anunciar su decisión de optar a liderar el PP.
De acuerdo a los plazos establecidos, la campaña electoral interna comenzará el 11 de marzo y tendrá una duración de 10 días. El 21 de marzo, es el día elegido para que los afiliados del PP al corriente de pago puedan votar a su candidato a la Presidencia del Gobierno.
Hasta ahora, aparte de Feijóo, solo una valenciana de Gandía, Alexia Herranz, ha anunciado que presentará también su candidatura para optar a "convertirse en la primera mujer transexual presidenta del Partido Popular en España". Los afiliados podrán votar el 21 de marzo y, después serán los 3.109 compromisarios los que elijan en el cónclave de Sevilla al sucesor de Pablo Casado.
Otra forma de hacer política
Estos días, Feijóo ha señalado que da el paso porque se siente en la "obligación" de ponerse a disposición de su partido y de España, y que "fallar" al PP era "fallar a Galicia". "Vengo a ganar a Sánchez, no a insultarle", proclamó el pasado 2 de marzo ante el PP gallego, al que pidió "autorización" para presentar su candidatura en el congreso que elegirá al sucesor de Pablo Casado.
Con una dilatada trayectoria política y cuatro mayorías absolutas en Galicia como aval, el presidente de la Xunta ya ha dejado caer que marcará su propia impronta a la dirección del PP al subrayar que no cree "en ministerios de relleno" ni en el "tuit de cada día" o "laboratorios políticos". "Tengo mi modo de ser, de hacer y de pensar", ha avisado.
Por lo pronto, Feijóo se ha abierto a alcanzar pactos de Estado con el Gobierno de Pedro Sánchez --la renovación del CGPJ lleva más tres años pendiente-- y ha puesto en valor su perfil institucional al dejar claro que él no cree en la "política de revanchismo, trincheras y odio" que ve en el panorama estatal.
Además, ha defendido una gestión descentralizada que ponga en valor el papel de las autonomías y de sus líderes regionales. A su entender, el PP tiene una estructura autonómica y el partido debe "aceptarla y no menoscabarla". Así lo dijo hace unos días en la Cope, donde criticó las "interferencias" y "desconsideraciones hacia muchos líderes del PP" que se han producido con el liderazgo de Pablo Casado y Teodoro García Egea.
Marca distancias con Vox
Feijóo se ha empezado a rodear de cargos del PP con experiencia, como evidencia el equipo que conforma el comité organizador del congreso de Sevilla. Muchos de ellos fueron estrechos colaboradores de Mariano Rajoy en Moncloa o en el partido.
"Se reventó un escalafón", ha asegurado fuera de micrófono un histórico dirigente del PP en alusión a las decisiones que tomó la cúpula saliente tras su victoria en las primarias del PP en 2018. Feijóo quiere contar con personas que han "ganado elecciones" y han organizado "muchos congresos", según ha añadido.
En cuanto a Vox, Feijóo ha admitido que muchos votantes de ese partido apostaban antes por el PP y se han ido. Eso sí, ha marcado distancias con la formación de Santiago Abascal dejando claro que el PP "nunca" ha sido un partido "antiautonomista ni euroescéptico ni populista" que cuestiona las instituciones españolas y europeas.
"Vox no es el PP, ni de ahora, ni de antes ni de nunca", afirmó esta semana, para asegurar que hay que "combatir" a ese partido convenciendo a la gente de que es necesario unirse porque si dividen el voto habrá "más PSOE y más populismo".
Una de las principales incógnitas es hasta cuándo estará Feijóo al frente de la Xunta de Galicia. Por lo pronto, ya ha confirmado que no impulsará un relevo apresurado al asegurar que no dejará Galicia "en un mes".
Eso sí, Feijóo también ha reconocido que "sabe perfectamente que no se puede compatibilizar sine die la presidencia de Galicia con la presidencia del PP". En el PP gallego aseguran que será un proceso "ordenado, tranquilo y sosegado" en el que sabrán estar "a la altura de las circunstancias", en palabras del secretario general del PPdeG, Miguel Tellado