Al menos un 57,7% de las jóvenes españolas han mantenido alguna vez relaciones sexuales "sin ganas" con la intención de "complacer", o como "sacrificio" hacia la otra persona, según se recoge en un estudio realizado por Sigma Dos para el Instituto de las Mujeres.
Para la directora de este organismo, Antonia Morillas, esta cifra demuestra "cómo se sigue perpetuando que el deseo propio sea considerado como un elemento secundario", frente a la "idea de disponibilidad ante el deseo del otro".
El informe recoge la opinión de una muestra de más de 1.500 jóvenes españolas de entre 18 y 25 años. Las participantes, además de contestar a cuestionario, han participado en una sesión de grupo en las que han profundizado en los diversos temas tratados en este trabajo sobre los Derechos sexuales y reproductivos de las mujeres jóvenes.
A través de este estudio se recoge que la edad media del inicio de las relaciones sexuales con penetración de las jóvenes españolas está en los 16,5 años y en un 72,3% se produce con una pareja. Un 62% utilizan métodos anticonceptivos de forma generalizada.
Sin embargo, esta generación de mujeres busca una deconstrucción de esta llamada primera vez y reclama que no se limiten a considerar relación sexual únicamente a aquellas que requieren penetración. Este es un ejemplo de lo que Morillas considera una "ratificación" de que "el feminismo está provocando
cambios profundos en los discursos y las concepciones de las mujeres jóvenes" y "en particular sobre la sexualidad". Según ha indicado, las jóvenes "desvinculan el sexo del amor" (64% de las encuestadas), "rompen con la heterosexualidad como norma" (un 18,5% se reconocen como bisexuales), o consideran la anticoncepción como una cuestión de corresponsabilidad (66%).
Entre estos datos, el informe también destaca que la mayoría de jóvenes lo considera un tema "importante" y que pasa por "hablar y compartir experiencias". De hecho, la mayoría hablan de los a diario o, al menos, una vez por semana ( de sexo, la mayoría hablan una vez por semana o a diario (46,7%), frente al 4,4% que "no lo hace nunca".
Además, la mayoría rechazan afirmaciones como que el hombre sea quien debe llevar la iniciativa en las relaciones sexuales (60%), que ellos sientan más deseo que ellas (76%) o que se utilice el cuerpo de la mujer como objeto (77%).
Sin embargo, el estudio también recoge algunas situaciones que no suponen cambios, en relación con generaciones anteriores, como que el 80% de quienes usan métodos anticonceptivos usen el preservativo.
Otras de las preguntas que han contestado las participantes de este estudio son referentes al aborto y al porno. En el primero de los casos, el informe recoge que un 5,7% ha interrumpido su embarazo, mientras que un 43% reconoce haber recurrido a la píldora del día después. En este sentido, un 40% dice haber sentido "apoyo y ayuda" por parte de la pareja ante un hecho como este, mientras que un 10% asegurado que no tuvo el apoyo de nadie o, habiéndolo pedido, no lo recibieron.
Sobre el acceso al porno, el trabajo determina que el primer contacto con él se produce a los 15 años de media y el consumo es poco habitual. De hecho, casi la mitad de las encuestadas dice que lo consume una vez cada tres meses. Según el informe, esta situación puede deberse a la mirada crítica de las jóvenes hacia esta industria, ya que en su mayoría consideran (52%) que está concebida para el hombre.
El trabajo destaca, sin embargo, que esta generación de mujeres no habla de prohibir la pornografía y simplemente habla de regular para restringir su consumo a menores.
De este informe se recoge, además que un 37,7% de las encuestadas ha practicado alguna vez el sexting y un 24,3% recurre a aplicaciones de citas para conocer a sus parejas sexuales.
Por otra parte, el estudio señala que las amistades (32%) e Internet (24%) son las principales vías de conocimiento sexual para las jóvenes españolas, a pesar de que el 65% ha recibido educación sexual en sus centros educativos. Aún así, estas 'alumnas' han calificado de 4,4 la materia recibida a lo largo de su vida en este sentido.
La mayoría la calificad de "insuficiente", "inadecuada" o que "no se adapta a sus inquietudes y necesidades". En concreto, creen que se centra principalmente en la anticoncepción.
En cuanto a la violencia sexual, un 68% de las jóvenes aseguran que han recibido comentarios inapropiados o sexista en espacios públicos, y un 36% tocamientos no deseados. Además, un 46% recibe comentarios agraviantes o sexuales en redes sociales sin consentimiento y un 9% ha sufrido un intento de violación o una violación consumada.
La directora del Injuve, María Teresa Pérez, ha calificado de "positivos" los datos que, a su juicio, muestran un "cambio generacional gracias al movimiento feminista", pero también ha lamentado otras cifras como las relacionadas con las relaciones sexuales sin deseo o las violencias sexuales sufridas. "Debemos hacer entender que el feminismo también es beneficioso para los hombres", ha apuntado.
A su juicio, la sociedad no puede permitirse que "los únicos mensajes" que reciben los chicos lleguen de "cuatro influencers misóginos y frustrados que fomentan el machismo y provocan situaciones y consecuencias negativas para todos".
Pérez también se ha referido a la influencia de figuras políticas como el vicepresidenta del Castilla y León, Juan García Gallardo, cuando defiende que "el sexo es solo para reproducirse", cuando "niega la violencia de género" o defiende que "hay que llegar virgen al matrimonio". También ha criticado la entrada de fuerzas como en Italia con un "putero como Berlusconi" o las declaraciones de Giorgia Meloni, hablando de "la familia natural".