La Policía Nacional detenía en Fuenlabrada a los presuntos culpables del asesinato de un chico que pertenecía a la banda rival. Eran de la cúpula de la banda de los Trinitarios, y al desmontarlos, la Policía descubrió que, además de financiarse vendiendo drogas, han comenzado a diversificar sus ingresos con otras actividades delictivas.
En esta operación, donde ha caído el líder de los Trinitarios en Orcasitas, han descubierto que en la cúpula había dos hackers menores de 30 años que gestionaban estafas bancarias, con las que han conseguido hasta 700.000 euros mediante el phishing, una forma popular de ciberdelincuencia que roba los datos personales de sus víctimas haciéndose pasar por una persona, empresa o servicio de confianza.
Enviaban un SMS para confirmar datos bancarios, haciéndose transferencias a otras cuentas. Además, duplicaban tarjetas para comprar criptomonedas difíciles de rastrear. Tenían hasta 40 intermediarios, gente joven que a cambio de dinero facilitaban sus datos para actuar en su nombre.
Tenían cuentas hasta en Alemania, Rumanía o en Suiza. En concreto 40 detenidos, pero solo 12 de ellos se llevaban la gran parte de ese dinero.
¿Qué usos le da una banda al dinero?
Pagar abogados cuando les detiene la policía y también comprar armas, como pistolas y machetes para enfrentarse a bandas rivales.