Durante el año 2022, los precios han subido seis puntos más que los salarios de los españoles. La subida salarial media pactada llegó al 2,6% en septiembre, por debajo de la inflación media, que se sitúa cerca del 9%. Sin embargo, las subidas salariales dependen del sector y en el de la distribución y los grandes almacenes planean subir el sueldo hasta un 18%.
Es el caso de grandes firmas como Lidl, cuyos sindicatos pactaron este verano una subida del 16,5% hasta 2025. También Dia (12,2%), Mercadona (6,8%) o Ikea, Leroy Merlin, El Corte Inglés, Carrefour y Alcampo.
Empresas de restauración Burger King o McDonald’s, prevén subir los salarios hasta un 18% en los próximos tres años. Según el economista José Carlos Díez, el problema es que "las empresas con muy pocos trabajadores, las que más sufrieron la pandemia y la crisis, no tienen representación en patronal ni sindicatos".
"La pregunta es ¿Quién paga esas subidas de salario?", cuestiona el economista. "Y hay un gran debate con los parados, que tendríamos que darles subida de su prestación o darles empleo".