El rey Felipe VI ha ensalzado la "firmeza" con la que su padre, Juan Carlos I, respondió a la intentona golpista del 23F y ha hecho una rotunda defensa de la necesidad de proteger y preservar la democracia porque "es un bien delicado".
En su discurso durante el acto por el 40 aniversario del fracaso de la intentona golpista celebrado en el Congreso, Felipe VI ha subrayado que España "vivió un ataque de extraordinaria gravedad contra su sistema democrático de derechos y libertades" y ha tenido palabras de recuerdo para los diputados y los miembros del Gobierno de entonces, y en particular para su presidente, Adolfo Suárez, por quien ha expresado su "gran admiración y gratitud".
También se ha referido al papel ejercido por Juan Carlos I "ante aquella inaceptable fractura del legítimo y legal orden democrático", quien "asumió como jefe del Estado su responsabilidad y su compromiso con la Constitución", y ha puesto en valor que "su firmeza y autoridad fueron determinantes para la defensa y el triunfo de la democracia".
LA DEMOCRACIA, UN BIEN DELICADO
Asimismo, ha defendido la necesidad de que tanto ciudadanos como instituciones protejan la democracia porque "es un bien delicado que precisa del mayor cuidado y de un respeto y dedicación permanente por parte de todos" y porque su erosión pone en peligro "los derechos y libertades de los ciudadanos".
También es necesario preservarla, ha sostenido el Rey, ya que "constituye una premisa irrenunciable para el pleno desarrollo de nuestro país y para el progreso, el bienestar y la prosperidad de nuestros ciudadanos". En el acto, que ha tenido lugar en el Salón de Pasos Perdidos, han estado presentes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; la presidenta del Senado, Pilar Llop; el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; y el presidente del Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes.
Asimismo, han asistido los cuatro vicepresidentes del Gobierno, al igual que el líder del PP, Pablo Casado. También han estado invitados los dos únicos 'padres' de la Constitución que aún viven, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y Miquel Roca i Junyent.