Jóvenes, el foco del coronavirus: "Si se emanciparan antes este problema no lo tendríamos en España"
Redacción
Los jóvenes están en el punto de mira en esta nueva ola del coronavirus. La noche, los botellones, los colegios universitarios, las fiestas en pisos... son focos principales de contagio y allí están ellos ¿Por qué es tan dificil que el mensaje de responsabilidad cale a ciertas edades? ¿Cómo podemos conseguir que se comprometan quienes pueden llegar a sentirse inmunes ante el virus?. En busca de algunas respuestas recurrimos a Carles Feixa, Catedrático de Antropología en la Universidad Pompeu Fabra, que es además coordinador de la Red sobre Juventud y Sociedad: "La mayoría de los jóvenes son asintomáticos y no son conscientes de llevar el virus hasta que ya es demasiado tarde".
Según el antropólogo, "el modelo de juventud que hemos creado en el sur de Europa y en España en particular se caracteriza por una larga dependencia familiar hasta edades muy tardías y es la raíz del problema. Si los jóvenes se emanciparan antes, este problema no lo tendríamos porque se contagiarían entre ellos", afirma.
También es destacable en esta tendencia el modelo de ocio nocturno generado en nuestro país desde los años 90: "A raíz de la desaparición de los pequeños locales en el centro histórico -los pubs- en horarios más de tarde y primera hora de la noche y el posterior proceso de nocturnización y de expulsión hacia las periferias de las grandes discotecas y los centros de ocio y luego el botellón como salida de ocio a causa de la precarización económica de los jóvenes. Cuando todo eso se junta con una pandemia es algo explosivo, como así está sucediendo".
¿Cuál es la solución? ¿Cómo debemos educarles los padres? "No es fácil pero sí es mucho más efectivo a estas edades no la infantilización y la bronca por la bronca sino el razonamiento y sobre todo el combinar derechos y deberes. Si infantilizamos a los jóvenes luego no debe sorprendernos que reaccionen así". El profesor Freixa incide en que sería necesario entonces dar voz a las asociaciones juveniles y llegar a los líderes de opinión de los jóvenes hoy en día, que no son los medios de comunicación tradicionales sino los youtubers e influencers: "Lo que no funciona nunca es la bronca que viene de arriba a gran escala de las autoridades o de las fuerzas del hombre y a pequeña escala de la 'juvenofobia' que se está observando en la sociedad que estigmatiza a los jóvenes".
La rebaja de la edad del voto a los 16 años, tenerlos más en cuenta en las decisiones políticas que se toman y que les afectan en el presente y sobre todo en su futuro y un reparto del trabajo: "Si se trabajara antes seguro que los jóvenes tendrían más responsabilidad porque serían conscientes de lo que cuesta ganarse la vida. El trabajo y el ocio no deben fragmentarse sino respartirse en las etapas de la vida, pero por desgracia nuestra sociedad navega en sentido contrario"